Mujeres kurdas: en guerra contra el Estado Islámico
No hay cosa en el mundo que tema los miembros del Estado Islámico que morir a manos de una mujer.
Los milicianos del Estado Islámico creen que si mueren en combate a manos de una mujer, sus almas arderán en el infierno, al contrario de lo que sucedería si caen a manos de un hombre.
Teniendo en cuenta esto, los kurdos, que combaten en su región contra el avance del EI (también conocido como ISIS), formaron un batallón femenino para atormentarlos y hacerlos retroceder.
Allí, las mujeres luchan por su libertad en todos los frentes: tanto en la guerra, como en la sociedad kurda, según se recoge en un documental elaborado por Rusia Today.
La ciudad siria de Serekaniye (Ras Al-Ayn), de mayoría kurda, es la última gran ciudad colindante con el Estado Islámico (EI).
La única fuerza que protege Serekaniye del grupo terrorista son las Unidades kurdas de Protección Popular (YPG). Desde 2012, una parte importantísima de las YPG está integrada por su sección femenina, las YPJ, que combaten al EI.
Las mujeres kurdas, muchas de las cuales apenas salían de su casa consagradas a los trabajos domésticos, se unen valientemente a estas unidades que desafían al EI, que en su día anunció que cualquier hombre que muera a manos de una mujer irá al infierno.
RT ha viajado hasta uno de los campamentos donde las mujeres, todas jóvenes solteras, se entrenan durante solo un mes antes de entrar en combate contra el EI, que se encuentra a tan solo 3 kilómetros de su campo, por lo que el combate puede empezar en cualquier momento. "Organizamos estos campamentos donde se dan las condiciones apropiadas y cambiamos de lugar constantemente", explica la comandante de las YPJ, compañera Tolhildan ('Venganza').
Fuente: Negocios.com